Una madre cubana identificada como Solange Romero, residente en La Guinera, Arroyo Naranjo, pidió ayuda para ella y sus hijos en medio de la desesperante situación de vivienda en que se encuentran.
La joven tiene cinco niños, está embarazada de jimaguas, y vive en condiciones de extrema pobreza en una casa de madera que se inunda cada vez que llueve.
En una directa publicada en Facebook explicó que cada vez que llueve, debe subir a la cama con sus hijos hasta que pase la tormenta, debido a las filtraciones en el techo de su precaria vivienda.
A pesar de estar inscrita en el plan demográfico desde 2021 por ser madre de cinco hijos, no ha recibido ninguna ayuda concreta ni solución a su situación de vulnerabilidad, relató.
"Es muy duro tener que subirte a la cama con tus hijos sin saber qué hacer, no hay salida", lamentó.
Una realidad preocupante en Cuba
El caso de Solange no es único en Cuba. En enero de este año, otro caso similar conmovió a decenas de cubanos, cuando se hizo pública la historia de Yuliet, una madre de siete hijos que vivía en condiciones de extrema pobreza en la provincia de Camagüey.
Yuliet, de 31 años, no tenía recursos suficientes para alimentar ni vestir a sus hijos, y su vivienda se encontraba en un estado deplorable, con toda la familia durmiendo en una sola cama.
Decenas de madres cubanas viven con varios hijos en situación de pobreza extrema, mientras el régimen es incapaz de proporcionarles una vida digna.
A pesar de que las autoridades han prometido priorizar a las madres con más de tres hijos en la resolución de problemas de vivienda, la realidad es que muchas mujeres como Solange y Yuliet siguen viviendo en condiciones inaceptables, sin acceso a recursos básicos ni soluciones a la vista.