Arlety Yerena Martínez, una madre cubana de 33 años, residente en Guanabacoa (La Habana), clama por agilidad en los trámites de su cita migratoria para poder emigrar cuanto antes con su hijo, Jorge Esteban Reina Yerena, quien padece de cáncer, a los Estados Unidos. En ese país, desde hace casi cuatro años, reside el padre del niño.
El padre no ha podido regresar a Cuba en todo este tiempo, pero se mantiene en contacto con su hijo a través de videollamadas. La familia recibió con mucha desilusión la confirmación de los médicos que atienden a Jorge Esteban: en Cuba ya se ha hecho todo lo posible y no hay más opciones para salvar su vida en estos momentos.
Sin embargo, eso no significa que no haya esperanzas. En el hospital donde atienden al niño, le han informado que la única solución es un trasplante de médula, pero lamentablemente no existen las "condiciones" necesarias para realizarlo en Cuba.
La desesperada búsqueda de una solución médica
Tras recibir esta información, es comprensible la urgencia de esta madre cubana por obtener el permiso para viajar a los Estados Unidos, donde ya tienen un centro hospitalario dispuesto a asumir el tratamiento del menor.
Esta sería la segunda entrevista a la que Arlety Yerena se presenta con su hijo, ya que en una ocasión anterior, cuando le otorgaron una visa de turista, se la denegaron, a pesar de haber expuesto la difícil situación que vive con su hijo.
Según explicó Arlety en una entrevista con CiberCuba, no se trata de que el niño no tenga más opciones en Cuba; el problema radica en que, al estar inmunodeprimido, es complicado tratar cualquier otra enfermedad que contrae. Le empiezan un tratamiento con un antibiótico y a los tres días ya no hay más medicamento y deben continuar con otro. Además, teme que pueda contagiarse de Oropouche, dengue u otras epidemias que proliferan en la Isla.
El pequeño Jorge Esteban, de solo siete años, lleva cinco luchando contra la leucemia. No puede jugar con otros niños, no puede exponerse al sol, se inflama y recibe quimioterapia y otros tratamientos, pero no todos le sientan bien debido a los problemas de higiene en los hospitales cubanos, que han provocado rechazo a algunos de ellos.
En resumen, la familia está desesperada. La vida de su hijo depende de la rapidez de las autoridades migratorias. 🙏