El estelar deportista cubano Mijaín López cumple este martes 42 años de vida, cuando todavía resuenan los ecos de su victoria en París 2024 para convertirse en cinco veces campeón en el estilo grecorromano de la lucha olímpica.
La fecha resulta especial en extremo, pues hace pocos días se cubrió nuevamente de gloria e hizo oficial su retiro de los colchones tras más de dos décadas en el alto nivel competitivo.
Aunque no han trascendido imágenes de sus festejos, el gladiador estuvo presente la víspera en el programa oficialista Mesa Redonda, donde repasó su actuación en la última lid bajo los cinco aros.
Retiro glorioso y aclamado
“Para vencerme hay que entrenar más que yo, porque afortunadamente en mis 22 años en la lucha casi no sufrí lesiones de gravedad, y eso me ayudó mucho en la preparación. Logré mantenerme al máximo porque mi mente es de campeones, siempre positiva y dispuesto a darlo todo por Cuba”, apuntó según el sitio Cubadebate.
Justamente, en su regreso a la isla, las autoridades cubanas convocaron a amigos, vecinos, deportistas y población en general a darle la bienvenida a López, a quien la propaganda del régimen ha convertido en uno de los símbolos del llamado deporte revolucionario.
Vale recordar que Mijaín, uno de los deportistas más activos a la hora de proclamar su apego al régimen, agredió físicamente a un activista que se manifestó contra el régimen en un estadio de Chile durante los pasados Panamericanos.
Una despedida legendaria
Desde el punto de vista deportivo, en la capital de Francia, López superó en la final a su compatriota Yasmani Acosta, representante de Chile, y bajó las cortinas de su cuasi inigualable carrera olímpica. La emoción tocó niveles insospechados al verlo arrodillado, colocar sus zapatillas en el centro del colchón y derramar lágrimas entre un manojo de sentimientos.
Con un andar lento, López, vestido de rojo, maillot apretado, retornó a la superficie competitiva y regaló una despedida legendaria para el deleite de las miles de personas presentes en el Champ de Mars Arena y las muchísimas más que lo vieron convertirse en el único deportista en la historia en ganar cinco veces el mismo evento individual bajo la sombra de los cinco aros.
Decir Mijaín es hablar de esos elegidos por la gloria, y se entiende que sea catalogado como el “GOAT” (el mejor de siempre) de la lucha, porque, además, suma otros cinco títulos universales y cuatro en lides multideportivas a nivel continental.
Su única derrota en Juegos Olímpicos aconteció el 24 de agosto de 2004 versus el ruso Kashan Baroev. Después llegaron solo sonrisas y bailes en Beijing 2008, Londres 2012, Río de Janeiro 2016, Tokio 2020 y París 2024.