Con un impresionante espectáculo de fuegos artificiales y un derroche en sus carrozas, el pueblo de Chambas, en la provincia de Ciego de Ávila, desarrolló sus tradicionales fiestas de Parrandas, declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Un fin de semana de rivalidad y tradición
El fin de semana la normalidad no estuvo presente en el terruño, cuando la población se dividió en dos bandos: uno azul, integrado por el barrio La Narcisa y representado por El Gavilán, y otro rojo, La Norte, con su símbolo El Gallo.
En redes sociales circulan varios videos donde se puede ver la majestuosidad de las carrozas, el vibrar de los fuegos artificiales, el ritmo de las comparsas y la idiosincrasia de la población, que salió a defender sus bandos con pasión y respeto, a pesar de la grave crisis que enfrenta el país.
Son festejos tradicionales que se vuelven retos para realizar en Cuba, en medio de la crisis energética que afecta al país y que mantiene en incertidumbre a la familia cubana.
Historia y pasión en cada calle
Las parrandas de Chambas florecieron en el año 1935, tomando como referencia las surgidas en el cercano San Juan de los Remedios en Villa Clara, en 1920. Se realizan durante tres días en el mes de agosto. El público toma las principales calles de la localidad, arrollando en conga, portando carteles y la bandera de cada barrio para ofrecer un espectáculo único.