El régimen cubano pidió el cese del “injerencismo” en Venezuela y denunció la resolución aprobada por los países que integran la Organización de Estados Americanos (OEA) a propósito del fraude electoral cometido por el régimen de Nicolás Maduro.
“Como alertamos, se impuso resolución injerencista sobre Venezuela en OEA. Esa organización, que apoyó golpes de Estado, dictaduras y no condenó invasiones de EEUU en la región, carece de autoridad para instar a nuestros países a someterse a mandatos espurios. Cese el injerencismo”, reclamó en X el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla.
El Consejo Permanente de la OEA aprobó este viernes, por consenso, una resolución que urgió al Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) a publicar las actas de la elección presidencial del 28 de julio, desglosadas por mesa de votación. Impulsada por Estados Unidos, la resolución también llamó al CNE a “respetar el principio fundamental de la soberanía popular, a través de una verificación imparcial de resultados que asegure la transparencia, la credibilidad y la legitimidad del proceso electoral”.
El texto consensuado recogió las preocupaciones expresadas por varios países de la región en relación con la transparencia y justeza de unas elecciones amañadas por un régimen que pretende perpetuarse en el poder al desconocer la voluntad popular expresada en las urnas por los venezolanos. Asimismo, condenó la represión desatada por Nicolás Maduro tras el fraude electoral y las manifestaciones pacíficas de protestas convocadas por la oposición.
Acorde a la Misión internacional independiente de determinación de hechos sobre Venezuela, establecida por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, se han registrado al menos 23 muertes, la mayoría de ellas por disparos, en el contexto de las protestas que han sacudido al país. Además, la Misión documentó la detención de al menos 1,260 personas, incluyendo 160 mujeres, aunque el Fiscal General de Venezuela elevó la cifra a más de 2,200 detenidos, muchos de los cuales han sido calificados como "terroristas".
La resolución ―adoptada sin que mediara votación pública― logró salir adelante dos semanas después de que un proyecto previo, discutido el 31 de julio, no alcanzó los votos suficientes para ser aprobado. En aquella sesión, el documento tuvo 17 votos de los 18 necesarios, con 11 abstenciones y cinco ausencias.
Denunciado como fraudulento por la mayoría de países de la comunidad internacional, el resultado de las elecciones venezolanas proclamado por el CNE solo ha sido reconocido por un puñado de países aliados del régimen de Maduro, entre los que se encuentran Cuba, Rusia, China e Irán.
Informe de la OEA denuncia la asesoría cubana en la represión en Venezuela
Las protestas de La Habana contra la presunta "injerencia" de países latinoamericanos en los "asuntos internos" de Venezuela contrastan con la penetración del régimen cubano en las instituciones del país andino, en especial en los estamentos armados y en la asesoría sobre control social y represión.
En mayo, la OEA presentó el séptimo informe anual del Instituto Casla, encargado de compartir con Latinoamérica las lecciones de democracia y economía que pueden sacarse de la transformación de los países excomunistas de Europa del Este. Elaborado por expertos internacionales independientes, el estudio denunció la asesoría cubana en la maquinaria represiva de Venezuela y solicitó a la Corte Penal Internacional que investigue su intervención y participación en la comisión de crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Tamara Sujú, directora del Instituto Casla, leyó en la presentación del informe el testimonio de una víctima venezolana de tortura que cuenta cómo la colgaron bocabajo y le azotaron en los pies con latigazos, que le hicieron saltar las uñas a los pocos días. "Había un cubano, que riéndose le decía a quien me azotaba: 'Me parece que no le estás dando con suficiente fuerza. Creo que voy a tener que enseñarte cómo se hace'. Ese cubano me azotó brutalmente los pies".
"Después de las manifestaciones de 2014, Maduro se puso al frente de la persecución, apoyado con la experiencia del régimen cubano en materia de represión y seguimiento, aplicación de técnicas intimidatorias, de tortura para someter a opositores y disidentes, permitiéndoles su participación en la planificación y ejecución de las torturas y violencia sexual", añadió Sujú.
El Instituto Casla identificó una unidad semisecreta del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) dedicada al adiestramiento de agentes en lo que llaman Base Cien. En ella, explicó Sujú, altos oficiales cubanos se dedican a la formación de funcionarios que se infiltran en los partidos políticos.
"Pedimos al equipo de investigación de la Corte Penal Internacional (CPI) que lleva el caso de Venezuela, investigar al régimen cubano por su participación directa en la formación, planificación de la represión, persecución y en la inducción de crímenes tipificados en el Estatuto de Roma", recalcó la directora del Instituto Casla tras denunciar al régimen cubano en la CPI por crímenes de lesa humanidad cometidos en territorio venezolano.
La denuncia comprende tres partes. La primera es un compendio sobre los antecedentes de la injerencia cubana en Venezuela y la penetración e imposición del modelo ideológico castro-comunista en todas las instituciones públicas, organismos de seguridad e inteligencia y Fuerzas Armadas Nacional, donde testigos de Cuba y Venezuela narraron para la Corte cómo sucedió esta fusión.
La segunda comprende testimonios de militares y civiles y su experiencia con el Gobierno cubano, bien sea porque trabajaron con ellos dentro de la estructura institucional, porque fueron formados y adiestrados en Venezuela y en Cuba por oficiales cubanos o porque tuvieron directamente contacto con agentes militares o de inteligencia cubana.
Por último, la tercera parte incluye los testimonios de las víctimas de torturas inducidas o ejecutadas por oficiales cubanos, conjuntamente con oficiales venezolanos, insistió Sujú.
El Instituto Casla obtuvo los ocho acuerdos confidenciales firmados entre Cuba y Venezuela el 26 de mayo de 2008, por el general Álvaro López Miera, en aquel entonces, viceministro de las Fuerzas Armadas de Cuba y jefe del Estado Mayor y el general Gustavo Reyes Rangel Briceño, ministro del Poder Popular para la Defensa. López Miera es actualmente ministro de la Defensa de Cuba.
El primer acuerdo entre Venezuela y Cuba habla de la creación y condiciones de permanencia en Venezuela del Grupo de Coordinación y Enlace de Cuba. El segundo, sobre el desarrollo del Servicio de Inteligencia Militar y el tercer acuerdo, sobre la asistencia técnica en la esfera de contrainteligencia.
Bruno Rodríguez Parrilla y sus declaraciones de 2019 desmintiendo el intervencionismo cubano
"Un gobierno reconocido por el uso de la mentira tiene a Bolton como alto exponente. Miente cuando dice que hay un ejército de 25,000 efectivos cubanos en Venezuela. Lo acompaña una verdad: confiesa la aplicación de la Doctrina Monroe", tuiteó el canciller cubano en marzo de 2019 con la etiqueta #ManosFueraDeVenezuela.
Un mes antes, el líder opositor venezolano Juan Guaidó afirmaba que “si hay una intervención sobre Venezuela, es la de Cuba”, una apreciación compartida y denunciada por Estados Unidos.
Por las mismas fechas, un equipo de periodistas de Univision encabezados por Jorge Ramos denunció la detención que sufrieron en el Palacio de Miraflores durante una entrevista que incomodó a Nicolás Maduro. Los reporteros, que fueron deportados, aseguraron que agentes cubanos participaron en el operativo.
En septiembre de 2018, tropas cubanas participaron en maniobras militares junto a la Fuerza Armada Nacional (FAN) de Venezuela, según informó el portal Infodefensa. En las maniobras militares, que se llevaron a cabo en la frontera entre Colombia y Venezuela, también estuvieron efectivos de Rusia y China.
"Vamos señor Bruno Rodríguez, ya esto no son los tiempos de que escondían todo al mundo. Y que Fidel se paraba a decir del Internacionalismo Proletario. Se acaba el tiempo de las mentiras Sr. Bruno. Se acabó el tiempo. Tic Tac, Tic Tac...", le recordó en marzo de 2019 al canciller cubano el periodista independiente Yordan Roque Álvarez.
Sus palabras fueron reproducidas en las redes sociales del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), que publicó una extensa relación de las fuerzas militares y represivas cubanas presentes en Venezuela.