Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), no pudo contener su entusiasmo este miércoles y asistió al emocionante enfrentamiento que coronó al cubano Mijaín López como campeón olímpico por quinta vez consecutiva.
Al finalizar la competencia, Bach se acercó al atleta cubano para felicitarlo. No se limitó a un simple apretón de manos o un abrazo, sino que el saludo vino acompañado de una profunda reverencia por parte del exdeportista alemán. Bach inclinó la cabeza y el torso, mostrando así su admiración y respeto por la increíble hazaña de López.
Un récord que quedará en la historia
Mijaín López hizo historia este martes al convertirse en el primer deportista a nivel mundial en lograr una quinta medalla de oro consecutiva en la misma prueba de los Juegos Olímpicos. Con casi 42 años, López se proclamó ganador en lucha grecorromana en la categoría de 130 kilos, al vencer por 6-0 al chileno de origen cubano Yasmani Acosta.
El público del Arena Campo de Marte lo apoyó con una ruidosa ovación, coreando repetidamente "López, López" con el deseo de presenciar un récord histórico que seguramente perdurará por mucho tiempo. Al terminar el combate, Mijaín López levantó los brazos al cielo, dio la vuelta al tapiz central, lo besó y se quitó los botines, dejándolos allí en un gesto tradicional de los luchadores tras su último combate.
El oro de París se suma a los obtenidos en Pekín 2008, Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020. Su debut olímpico fue en Atenas 2004, con 21 años, cuando quedó en quinto lugar. En su currículo también figuran cinco oros y tres platas en campeonatos mundiales y cinco oros en Juegos Panamericanos.
Antes de su impresionante victoria de este martes, el cubano estaba empatado con cuatro oros olímpicos consecutivos en la misma especialidad con los estadounidenses Michael Phelps (natación), Carl Lewis (salto de longitud) y Alfred Oerter (lanzamiento de disco), así como con el danés Paul Elvstrom (vela) y la japonesa Kaori Icho (lucha).