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Mijaín López se lanza a la conquista de su quinto oro en París y anuncia su retiro definitivo

jueves, 1 de agosto de 2024 por Dolores Valdés

Pletórico de confianza en el éxito, el luchador cubano Mijaín López arribó este jueves a París para afrontar el reto de conseguir su quinta corona en los que definitivamente serán sus últimos Juegos Olímpicos.

Campeón de Beijing 2008, Londres 2012, Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020, el considerado "GOAT" ("el mejor de la historia") del estilo grecorromano dijo sentirse contento de estar en la sede del evento y listo para competir el venidero día 5 de agosto.

“Estaré sobre los colchones para demostrar una vez más que puedo lograr el objetivo. Física y mentalmente siempre he estado preparado. Solo resta llegar y hacer las cosas que hemos hecho”, expuso el gladiador a la prensa en declaraciones publicadas en la red social Facebook.

Desafíos en el camino

Sobre el posible enfrentamiento contra el actual monarca mundial de los 130 kilogramos, el iraní Amin Mohammadzaman Mirzazadeh, visto por algunos como el favorito, el fornido antillano expuso que ya lo derrotó en Japón y que la experiencia tendrá protagonismo si sucede el combate.

Otros rivales a considerar son el egipcio Abdellatif Mohamed Ahmed Mohamed y el estonio Heiki Nabi, quienes también anhelan romper la racha de éxitos del varias veces monarca universal y panamericano.

Para mayor morbo, la prestigiosa revista deportiva Sports Illustrated publicó su habitual lista de pronósticos y una de las sorpresas es que vaticinó apenas una medalla de bronce para la leyenda.

El adiós de una leyenda

Mijaín debutó bajo los cinco aros en la edición de Atenas 2004, de donde se despidió como ocupante del quinto lugar. Después solo han llegado reinados en línea, como recuerda JIT en la red social X y su página web.

De hecho, el pinareño ratificó que será su última lid a este nivel: “Es oficial que llegó la hora de retirarme. Son muchos años de carrera y es hora de descansar y tener momentos con la familia”.

Para cumplir el plan de entrenamiento, la delegación cubana decidió que López no fuera el abanderado masculino en la inauguración de la justa y su lugar lo ocupó el boxeador Julio César La Cruz, quien quedó eliminado en debut en los 92 kilogramos.