Un ataque masivo a la red de trenes de alta velocidad (TGV) ha paralizado el tráfico ferroviario entre París y varias regiones del país. Otro intento de sabotaje fue frustrado en la línea sudeste, según informó la empresa nacional francesa de ferrocarril (SNCF).
Los incidentes coinciden con el día previsto para la inauguración de los Juegos Olímpicos y en pleno periodo de salida de vacaciones en Francia. Afortunadamente, no se reportaron víctimas mortales ni heridos, aunque las acciones requirieron la intervención de bomberos y policía. Los sabotajes han causado cuantiosas pérdidas económicas y generado preocupaciones sobre la seguridad en los Juegos Olímpicos de París 2024, un evento deportivo de gran importancia que está por comenzar.
Evacuación en el aeropuerto y más temores
Además, el aeropuerto franco-suizo de Basilea-Mulhouse fue evacuado debido a un aviso de bomba, aumentando el temor de posibles acciones que puedan empañar la apertura de los juegos. Las autoridades sospechan que los ataques, en su mayoría incendios provocados, podrían ser obra de militantes de extrema izquierda o grupos ecologistas violentos, posiblemente con complicidad interna en la SNCF.
La SNCF informó que los problemas en las líneas ferroviarias perturbarán gravemente el tráfico durante todo el fin de semana. Recomendaron a los pasajeros posponer sus viajes y ofrecieron opciones de canje y reembolso de billetes. El gobierno francés ha condenado enérgicamente los ataques, calificándolos de actos criminales y asegurando que se trabajará para detener y castigar a los responsables.
Reacciones del gobierno y medidas de seguridad
El primer ministro, Gabriel Attal, y otros miembros del gobierno expresaron su solidaridad con los pasajeros afectados. El prefecto de Policía de París, Laurent Nuñez-Belda, anunció el envío de refuerzos policiales a las principales estaciones para garantizar la seguridad. El gobierno francés pidió a los ciudadanos que eviten acudir a las estaciones afectadas para evitar aglomeraciones y prometió enviar información personalizada a cada viajero por SMS.
Los sabotajes han causado retrasos en tres de las cuatro líneas de alta velocidad, afectando a unos 800.000 pasajeros, incluyendo el servicio Eurostar que conecta París con Londres. La distribución de los ataques sugiere una intención clara de entorpecer el tráfico en ejes esenciales, con incidentes reportados en diversas localidades, aunque uno de los planes pudo ser desarticulado a tiempo.