La actriz y activista cubana Kiriam Gutiérrez Pérez ha sido objeto, una vez más, de la censura debido a la represión policial y la persecución a la que la tiene sometida la Seguridad del Estado. Así lo dejó saber el periodista independiente Héctor Valdés Corcho en una extensa denuncia realizada en su perfil de Facebook.
Reina de la Copla en Cuba bajo la sombra de la censura
"Hoy en la mañana, varios activistas de la comunidad LGBTI se comunican conmigo para informarme sobre una situación que sucedió antes de la realización de la competencia de transformismo Reina de la Copla en Cuba", escribió Valdés Corcho, aclarando que sus palabras no van contra los organizadores del evento sino por la situación generada con Kiriam.
"La situación es sobre el incidente de vetar, una vez más, a la artista cubana Kiriam Gutiérrez Pérez, una activista que durante años ha luchado duramente por el respeto de los derechos de esa misma comunidad que hoy guarda silencio ante los miles de intentos de prohibición de trabajar. Esa misma comunidad que hoy gira la vista hacia el lado y se vuelve cómplice de lo arbitrario", expresó.
El hecho está basado en una prohibición a la artista trans de presentarse en el evento, incluso como público. "La excusa ante la prohibición de asistir, incluso como público, fue un anónimo enviado a los organizadores del evento donde informaban que Kiriam realizaría un acto a modo de protesta en contra del régimen cubano; y que esto pasaría automáticamente a crear una especie de caos en el escenario de dicho evento", contó el periodista independiente radicado en Estados Unidos.
Ante varias preguntas hechas por Valdés Corcho en las que critica el menor pensamiento hacia la posibilidad de que Kiriam pudiera hacer un acto contestatario contra el régimen, utilizando los micrófonos de un evento oficial, prosiguió su escrito reprochando que no se hubiera verificado la información del anónimo. "Si vamos a jugar a ser profesionales, pues juguemos bien", aseveró.
"Yo acabo de hablar con Kiriam, está devastada, lloró como nunca la había visto. Se siente sola, se siente mal, se siente que todo el mundo le ha dado la espalda; porque sí, le han dado la espalda. Le han virado el cuerpo a una persona que desde el día uno ha estado ahí para todos y que ha luchado porque espacios como estos puedan ser disfrutados por todos y todas", relató sobre el sentir de la artista trans.
Valdés Corcho enumeró, además, las consecuencias de ese anónimo, que no se limitan al veto recibido recientemente sino que también involucran la preocupación por el sostenimiento que Kiriam tiene que hacer de su madre, una mujer mayor que depende de ella. "Incluso, hoy por hoy; después de ese anónimo, Kiriam puede ser investigada por ese supuesto acto de contrarrevolución que se comunicó que realizaría, algo que valga aclarar; es incierto", dijo.
Kiriam ha tenido constantes encuentros con la Seguridad del Estado, el órgano que busca reprimir sus pensamientos y la condena por ser homosexual, a pesar de que el régimen se ufana de haber aprobado un Código de las Familias. El pasado año, ese órgano del Ministerio del Interior la amenazó con retirarle sus implantes mamarios.
En una extensa publicación de sus redes sociales, la activista trans relató las dificultades que enfrentó para llevar adelante su decisión de hacer la transición en un país que no contaba ni cuenta con un marco legal que garantice de manera óptima y segura este proceso.