Cientos de personas se dieron cita en la tarde de este domingo en la Iglesia Metodista San Juan, en Santiago de Cuba, para celebrar un culto especial en homenaje a los trabajadores de la salud de esa provincia. “Les honramos por su esfuerzo y dedicación mientras oramos por sus vidas. En su inmensa mayoría recibieron a Cristo como su Señor y Salvador. Solo a Dios sea la Gloria”, escribió en redes sociales el pastor Darlon Bermúdez.
Una multitud se congrega para apoyar a sus médicos
El culto “El médico amado” tuvo lugar a las cuatro de la tarde y numerosas personas se congregaron dentro y en los alrededores de la iglesia para la celebración, en la que los galenos vistieron sus batas médicas. Imágenes difundidas por el pastor Darlon Bermúdez confirmaron el extraordinario seguimiento que tuvo el evento de la Iglesia Metodista San Juan ubicada en las inmediaciones del céntrico Parque de Céspedes de Santiago de Cuba.
El periodista Yosmany Mayeta se hizo eco de la celebración, que calificó de “motivadora iniciativa” y llamó a recordar que “la escasez y desatención gubernamental reina en los hospitales de la ciudad”, lo que hace todavía más delicada la actual situación. El comunicador santiaguero apuntó que “los médicos y personal de salud siempre se encuentran prestos para atender a las personas necesitadas, aunque la precariedad no les permite desarrollar su trabajo” de forma efectiva.
Una crisis sanitaria que no cesa
Desde hace semanas Santiago de Cuba padece una compleja situación epidemiológica con la circulación confirmada de cuatro virus: dengue, influenza, oropouche y SARS-CoV-2, este último causante del COVID-19, según alertaron fuentes oficiales. Aris Batalla, representante de la Cruz Roja en Santiago de Cuba, informó la pasada semana que la presencia de estos virus pone en riesgo a la población, la cual debe extremar las medidas preventivas en medio de una extrema escasez de medicamentos como analgésicos y antipiréticos.
El director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), Francisco Durán, reconoció por su parte que el país no cuenta con combustible para fumigar contra los mosquitos, en medio de una creciente presencia del Virus del Oropouche en Cuba. En ese contexto trascendió que el hospital provincial Saturnino Lora de Santiago de Cuba se encuentra colapsado, sin camas ni recursos, para atender la creciente llegada de pacientes.
La ceremonia no solo fue un acto de fe, sino también un grito desesperado de una comunidad que lucha contra la adversidad sanitaria y gubernamental. ✊