Siete balseros cubanos arriesgaron sus vidas y lograron llegar a las costas de Isla Mujeres, al este de México, en la mañana de este sábado, a pesar de las adversas condiciones climatológicas provocadas por una onda tropical y la proximidad del potente huracán Beryl al mar Caribe.
El grupo recaló a la altura del hotel MIA Reef, en el norte del famoso destino turístico cercano a la península de Yucatán, ante la mirada curiosa de vacacionistas, según un informe de la Novena Región Naval de la Armada de México perteneciente a la Secretaría de Marina.
Una travesía peligrosa
“Sin importar las inclemencias del tiempo y el peligro que corrían al navegar en mitad del temporal”, los cubanos “sortearon la lluvia, el oleaje y la escasa visibilidad, en busca de una oportunidad fuera de su país”, reseñó una nota de Diario Cambio 22.
Los inmigrantes cubanos -todos hombres- arribaron a bordo de una precaria embarcación de fabricación casera, que quedó varada entre las rocas detrás del hotel, en el litoral oriental de la isla.
Efectivos de la Policía Municipal y personal de Infantería de Marina y de Sanidad Naval acudieron al lugar tras el aviso de los turistas y comprobaron el buen estado de salud de los balseros, luego de someterlos a un examen médico.
Las autoridades aseguraron que “durante el auxilio a las citadas personas extranjeras, se actuó con apego y respeto de los derechos humanos”.
No han sido revelados los nombres de los siete cubanos ni el tiempo en el que hicieron la riesgosa travesía que los llevó a México.
Destino incierto
Los migrantes “fueron trasladados a bordo de una embarcación tipo Defender de la Estación Naval de Búsqueda, Rescate y Vigilancia Marítima (ENSAR) de Isla Mujeres, hacia la Estación Naval de Puerto Juárez, Quintana Roo”. Allí fueron puestos a disposición de autoridades del Instituto Nacional de Migración y de Sanidad Internacional, a fin de llevar a cabo los trámites legales correspondientes durante su estancia en territorio nacional, según el comunicado.
En mayo pasado, cuatro balseros sobrevivientes de un naufragio en el que murieron otros cuatro cubanos, fueron rescatados por pescadores mexicanos luego de pasar 34 días a la deriva en altamar. El gobierno mexicano les otorgó tarjetas de residencia por razones humanitarias.
En otro incidente hace un mes, personal naval de la Secretaría de Marina rescató a 51 balseros que se encontraban a bordo de dos embarcaciones rústicas frente a las costas de Quintana Roo.