Un área de bajas presiones localizada en el océano Atlántico se transformó este viernes en la Depresión Tropical Dos de esta temporada y amenaza con convertirse en huracán cerca de Cuba. Este sistema presenta vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora, con rachas superiores, y una presión mínima central de 1007 hectoPascal, informó el Instituto de Meteorología de Cuba (Insmet).
Detalles de la tormenta
Según un parte de última hora, a las cinco de la tarde el centro de la depresión se encontraba en los 9.1 grados de latitud norte y 41.9 grados de longitud oeste, situándose a unos 1970 kilómetros al este-sureste de Barbados, la isla más oriental del arco de las Antillas Menores. La depresión se desplaza hacia el oeste a una velocidad de 33 kilómetros por hora.
Se espera que en las próximas 12 a 24 horas la Depresión Tropical Dos continúe su desplazamiento hacia el oeste-noroeste, ganando en organización e intensidad. Es probable que se convierta en la tormenta tropical Beryl esta noche o mañana sábado, y en huracán durante el domingo, antes de alcanzar el arco de las Antillas Menores, el límite oriental del mar Caribe, al que llegaría con categoría 2 o 3.
Dada su evolución y futura trayectoria, se mantiene una estrecha vigilancia sobre este ciclón tropical. Se espera que el sistema se fortalezca y se convierta en huracán al llegar a las Islas de Barlovento a última hora del domingo o el lunes. Es probable que se emitan alertas de huracanes y tormentas tropicales para partes de las Islas de Barlovento y del sur de Sotavento más tarde esta noche o el sábado, señala la nota.
El próximo aviso sobre este sistema se emitirá en Cuba a las seis de la tarde del sábado; pero el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, dijo que en la región se estarían actualizando partes meteorológicos para mantener a la población informada.
Esa entidad con sede en Miami informó horas antes que la onda tropical ubicada a unas 1,400 millas al este-sureste de las Islas de Barlovento tenía un 100% de probabilidades de convertirse en un huracán en los próximos días.
Los meteorólogos estadounidenses y cubanos han previsto que la actual temporada ciclónica será la más activa de los últimos 40 años.