La Oficina Nacional de Administración Tributaria de Cuba (ONAT) ha destapado un alarmante caso de evasión fiscal que asciende a más de 800 millones de pesos en los primeros cuatro meses del año. Belkis Pino Hernández, vicejefa primera de la ONAT, reveló al diario Granma que entre enero y mayo se llevaron a cabo unas 80,852 acciones de control, identificando adeudos por un total de 819 millones 594 mil pesos.
Detalles del escándalo tributario
Según la funcionaria, hasta el cierre de mayo de 2023, se presentaron 210 informes de denuncias por presunta evasión fiscal, de los cuales 207 corresponden a personas naturales y solo tres a entidades. De esta suma, 30 expedientes se archivaron cuando los deudores abonaron sus pagos debidos, otros 117 expedientes continuaron su curso legal y 63 casos permanecen pendientes.
Entre las irregularidades detectadas están la desactualización, manipulación o alteración de libros, registros, submayores y otros modelos, las cancelaciones de cuentas por cobrar sin respaldo documental y la no declaración de la fuerza de trabajo contratada.
Judith Navarro Ricardo, especialista de la dirección jurídica, informó que la respuesta de la ONAT a estas "acciones fraudulentas" fue efectuar un "elevado número" de retiros de autorización, embargos y regulaciones de salida del país (prohibiciones a viajar). La directiva no ofreció datos específicos.
Este escándalo pone en evidencia las profundas fallas del sistema tributario en Cuba, el cual sigue siendo un reflejo de la ineficiencia y corrupción que caracteriza al régimen socialista comunista del país.