La Seguridad del Estado impidió que el joven de 23 años Armando Sardiñas, quien cumplió una condena de 10 meses por las protestas del 11 de julio de 2021, abandonara el país. Sardiñas y su hermana denunciaron en redes sociales que al llegar a la taquilla de Inmigración, donde las autoridades revisan la documentación de los viajeros, dos agentes de la Seguridad del Estado encargados de acosar al joven se acercaron, le rompieron el boleto de avión y le informaron que estaba "inhabilitado" para viajar.
"Viste que nosotros sí hacemos lo que queremos", le dijeron después de anunciarle esta decisión. "Dos individuos, los mismos que lo han estado acosando últimamente, se presentaron en las oficinas de Inmigración del Aeropuerto Internacional José Martí. Los imagino con la lengua afuera, como sabuesos detrás de la presa que se les escapa, para continuar el acoso y abuso de poder que caracteriza a la mafia que es la Seguridad del Estado de Cuba, e impidieron a mi hermano viajar, declarando su viaje 'inhabilitado', rasgando su boleto, y anunciándole que 'mañana iban a hablar con él'", contó la hermana del manifestante, Jacqueline Hope.
Por su parte, Sardiñas cuenta que "perdió todo, el sacrificio de su familia, sus sueños se volvieron una pesadilla en ese instante cuando le tocó su turno en emigración para chequear su vuelo e ingresar a la sala de espera".
La cruel realidad de la Cuba socialista
"Esta es la Cuba socialista, el paraíso que muchos promueven, en el cual por colaborar con un medio independiente te niegan y te violan los derechos, te prohíben el derecho a ir a donde quiera y decidas, ya sea a la esquina de tu casa. No pierdo las esperanzas, algún día seré libre, podré desahogarme y sacar todos esos sentimientos y anécdotas que llevo viviendo desde el 11 de julio de 2021", expresó.
Sardiñas, quien actualmente es colaborador del medio independiente CubaNet, fue condenado a 10 meses de trabajo correccional con internamiento en el campamento La Lima, en Guanabacoa (La Habana), en octubre de 2021, por su participación en las históricas protestas antigubernamentales del 11J. Desde entonces, tanto él como su familia han sido objeto de acoso por parte de la policía política.
El pasado 14 de abril fue detenido por agentes de la Seguridad del Estado mientras se encontraba documentando la Marcha del "Día del Perro" en el Cementerio de Colón en La Habana. Los represores del régimen lo mantuvieron bajo arresto e incomunicado durante siete horas, sometiéndolo a un intenso interrogatorio, según reveló la información publicada por el citado medio independiente.