Lázaro Guerra Hernández, director técnico de la Unión Eléctrica (UNE), aseguró que la sincronización de varios bloques de generación eléctrica en Cuba a lo largo de esta semana disminuirá el brutal impacto de los apagones, que para este martes se esperaba que rondaran los casi 1,500 MW.
¿Una luz al final del túnel?
“Habíamos explicado el domingo que esta semana es importante porque tenemos un grupo de incorporaciones de unidades importantes al sistema que estamos pensando que en el transcurso de la semana mejoren la condición a medida que se vayan incorporando estas unidades al sistema, y llegar al final de la semana en una mejor condición en la disponibilidad de la generación térmica, que es la generación base del sistema”, declaró Guerra Hernández en la Televisión Cubana.
“Eso nos va a permitir indiscutiblemente reducir las afectaciones al servicio”, añadió.
El directivo precisó que la unidad número 6 de la termoeléctrica de Nuevitas, que había salido de circulación por una avería, sería la primera en volver a generar. Señaló que le seguirá la unidad número 1 de Felton, con una capacidad de más de 200 MW, y luego el ciclo combinado de Energás Varadero, con alrededor de 90 MW. Posteriormente se espera la incorporación de la unidad número 3 de Santa Cruz del Norte (80 a 85 megavatios) y hacia finales de semana la unidad número cinco, de Mariel (65 MW).
“En total, serán entre 500 y 550 megavatios más de potencia los que habrá que incorporar”, aseguró.
El periodista Bernardo Espinosa sugirió a la población que se mantenga informada a través de los canales establecidos por la Unión Eléctrica en cada territorio del país para que conozcan la programación de afectaciones diseñadas, aunque admitió que los apagones se están yendo por encima de lo concebido.
“Sí, cuando las afectaciones son elevadas se complejiza mucho la situación de los circuitos porque realmente se hace muy complejo y como depende mucho de la disponibilidad en cada momento del sistema... Ahora mismo tenemos un nivel de indisponibilidad por combustible que en el transcurso del día va mejorando, pero todavía en ese momento no es”, explicó Guerra.
“La variabilidad que pueda tener la disponibilidad de la generación en el tiempo, eso va a traer como resultado la magnitud de la afectación al servicio y en función de eso la distribución que hacemos por cada uno de los territorios de la afectación, pero indiscutiblemente con los valores estos se hace complejo la rotación de los circuitos por los territorios”, concluyó.
La Unión Eléctrica (UNE) de Cuba publicó un descorazonador parte este martes que advertía de apagones que en horario pico podían alcanzar nada menos que los 1,440 MW, cifra que no mejoraba demasiado de cara al horario diurno, en el que se pronosticaban afectaciones en el orden de los 950 MW.