Jorge Junior ha salido en defensa de su primo El Taiger, después de que comenzaran a circular por las redes sociales las imágenes del encontronazo que protagonizó con Ja Rulay el pasado domingo durante un evento en Varadero.
Según se podía apreciar en los videos de la pelea, El Taiger acaba saliendo de la escena corriendo y protegido por sus acompañantes, un gesto que muchos han catalogado de cobardía ante la amenaza de Ja Rulay.
Jorge Junior quiso pronunciarse al respecto y salió en defensa de su primo, alegando que corrió porque Ja Rulay iba custodiado de personas del comando y policías de Cuba, por lo que si se producía un altercado mayor El Taiger estaría en desventaja.
"Ya no me estén llamando para preguntarme por lo mismo. Sigo en mi posición pero mirando las cosas. Caballero, ya no se engañen más que todo eso es una falsa. El Taiger tenía a su lado a los tipos más locos en el ambiente, que no existe pin….a, si eres de ambiente, para cruzar esa raya. El Taiger y los suyos estaban batidos contra el comando y la policía que estaban custodiando a su enemigo", comentó Jorge Junior en un escrito que compartió en su cuenta de Facebook.
A continuación, el líder de la agrupación Los 4 asegura que Ja Rulay está conectado con la seguridad del país y que la reacción de retirada que tuvo El Taiger fue simplemente para evitar una emboscada.
"Con el mayor respeto, que alguien me diga los nombres de la seguridad de este muchacho y me callo. Lelo, recuerda que nos conocemos de cerca y sabemos el modo de trabajo que haces", añadió.
"Fíjate si saben, que no es lo mismo darle un tiro a uno de la calle que uno del comando. Menos mal que no se usó. Nada, sigo aquí mirando pero en talla, para que no se confundan. El Taiger jamás corrió, solo se liberó de una emboscada", finalizó.
Dicha versión de la pelea es la misma que ha defendido El Taiger. El reguetonero explicó a través de una transmisión en directo que realizó en su cuenta de Instagram que no salió corriendo de la escena, sino que simplemente decidieron retirarse para no causar daños a un agente de comando o policía, pues no era lo mismo que agredir a alguien de la calle y las consecuencias serían mayores.